Cuando en lo alto de la montaña esta un amigo, es mas fácil subir

5ª Etapa TMB: Maision Vielle - Refugio Elena

La prometida noche de descanso en nuestra habitación particular en Masion Vielle no fue tan buena como creíamos. Encima de nuestro dormitorio estaba la terraza por donde se accedía a las habitaciones de arriba y las pisotadas y golpes nos despertaron bien prontito.

Cuando por fin asomamos la cabeza por la ventana nos llevamos a ingrata sorpresa de ver que el día amenazaba con ser el peor, meterologicamente hablando, de los disfrutados hasta el momento.

Hoy no había que madrugar mucho pues ibamos a bajar a Courmayeur con el teleferico que unía las pistas con la ciudad. El primero salía a las 9.30 de la mañana asique no merecía la pena levantarse demasiado pronto.



El fuerte desnivel de 1000m lo vimos desde la cabina del teleferico, acompañados una vez mas por la familia Anglo-Suiza que nos contaron que hoy entre buses que iban a coger y recorrido a pie, iban a dejar ya Italia y cruzando el collado de Gran Ferret llegar a Suiza para dormir.



Una vez en Courmayeur, pueblo que me pareció muy pictoresco, comenzó el debate. Hugo quiso hacer jornada de descanso cogiendo el bus hasta el final del val de Ferret y solo hacer la ultima subida al refugio de Elena a pie. Nuestro plan inicial era hacer la ruta del Monte Saxe pero cierto es que las magnificas vistas que esa ruta prometía a cambio de un desnivel mas fuerte que la oficial del TMB, no las ibamos a poder disfrutar con este tiempo de m*****. Dudas, dudas, y mas dudas...al final a las 10:30 Laura, Jesus y Javi marcharon dirección Bertone y Monte Saxe, y Hugo y yo nos quedamos tomando un café con la idea de buscar la estación de autobuses.



Psicologicamente maltratado el pobre Hugo al final tomó la decisión de seguir a pie hacia nuestro siguiente destino, y a las 11 y poquito ya estabamos comenzando la subida de mas de 1000 metros entre Courmayeur y el refugio de Bertone. La ruta en si era muy bonita pues el pinar entre la niebla parecía encantado. Por el camino pudimos ver numerosas setas que en el Bierzo corresponden a Octubre e incluso Noviembre.







El refugio Bertones estaba escondido entre la niebla, nos tomamos la pizza que habiamos comprado en el pueblo antes de tirar de nuevo, y seguimos la ruta por el camino que indicaba "TMB refugio Bonatti". Nosotros descartamos subir al Monte Saxe porque la lluvia y la niebla ya nos tenían un poco hartitos y esperabamos tener mejores vistas andando a media ladera sin subir mas entre las nubes.









El sendero a Bonatti no estuvo mal, veíamos el valle de Ferret al fondo de todo y pasamos numerosas casetas abandonada y granjas de vacas; mantuvimos la altura sin bajar nada hasta llegar al refugio Bonatti, refugio que estaba decorado al estilo Himalayo con banderitas de colores.





Mientras descansabamos un rato en Bonatti (ya habíamos atacado el embutido por el camino) vimos en la ladera enfrente a 10 minutos de refugio tres figuras conocidas, dos gusiluz y un hombre de negro...era la avanzadilla del grupo! Logramos hacernos oir y nos esperaron hasta que los alcanzamos y nos reencontramos. Segun contaban, no estaban de todo seguros por donde habian ido ese día, en un principio tomaron la señal hacia el Monte Saxe pero entre la señalización a la Italiana, la niebla y la falta del libro (...) no quedó muy claro que ruta hicieron. Mencionaron un par de incidencias que se encontraron por el camino que Hugo y yo tambien habíamos visto asique supusimos que subirian hacia el Monte Saxe pero en algun momento tomarían una alterantiva que les bajaba a la ruta oficial del TMB; lo que estaba claro era que el día no nos acompañaba y los Grandes Jorasses sobre los que tanto había oído hablar al final tampoco los ibamos a ver...

Desde Bonatti seguimos la ladera hacía delante durante mucho tiempo para luego ver como el sendero giraba sobre si mismo una y otra vez hasta llegar al fondo del valle. Esto no me cuadraba nada, juraría que el refugio no estaba en el fondo del valle...

Sorpresa! despues de descender interminablemente hasta llegar abajo el día nos regaló su sopresa final, una remontada dura hasta el refugio de Elena!



La lluvia fue nuestro constante a partir de ahí y hasta las 6 de la tarde no llegamos al refugio, justo con tiempo para ducharnos y recomponernos para la cena.







El refugio Elena, a media subida del collado de Gran Ferret, era un tanto particular. Asemejaba mas un hotel de montaña con muchisimas plazas y muchisimo ruido y movimiento de gente. Las instalaciones estaban francamente bien, y para variar, no hacía nada de frio dentro, mas bien hacia un calorcito bien agradable. Mi unica valoración negativa sería que quizá precisamente debido a lo que menciono de su tamaño, se recibía un trato poco personal y los empleados del refugio parecían un poco hartos de su trabajo...

Y así terminó el día mas largo y para mi gusto, mas duro, de los que habíamos disfrutados hasta el momento. Quizá por la dureza del día los humores no estaban tan livianos como de costumbre y aparecieron las primeras ampollas y rozaduras en los pies de Laura. En consideración, lo habíamos hecho de fabula, el desnivel del dia era una barbaridad siendo cerca de los 2000m positivos y además era una ruta larga con ninguna recomensación paisajistica debido al tiempo; de hecho, no nos habiamos quitado el chuvasquero practicamente en todo el día!

Y a la camita a nuestra hora de siempre, como los pajaros, con la ilusión de que mañana despertaramos viendo un sol magnifico iluminando todos los Grandes Jorasses y de fondo el huidizo Mont Blanc...pero que ilusa soy!

1 comentario:

  1. bueno, yo también comentaría como valoración negativa la falta de "intimidad" (osea, pestillos) en los cuartos de baño y las duchas.... y por supuesto, esos agujeros en el suelo llamados wc.....

    ResponderEliminar