La cascada escondida en Carracedo de Compludo es de las bonitas del Bierzo, pero sobre todo si tienes la oportunidad de visitarla congelada.
Aprovechando la ola de frío que nos azotó en enero, logré convencer a un compañero para ir a visitarla. Sabía que no seríamos los únicos ya que había visto alguna foto de ella congelada en las redes sociales e imágenes así impresionan y animan a muchos a ir a verlo en directo.
El camino hasta la cascada no presenta ningún secreto, un buen camino que aunque tenía nieve se hacía bien. El problema se presentaba cuando dejabas el camino y tenías que bajar por un sendero muy pindio hasta la base del gualtón; estaba prácticamente congelada y con su inclinación se hacía bastante peligrosa... pero mereció la pena, vaya catedral de hielo.
Como se preveía había bastantes personas por ahí y en un momento dado parte del hielo se desprendió con un gran estruendo, no golpeando a ninguna persona de pura casualidad. A mi personalmente me puso muy nerviosa y pensé lo incautos que habíamos sido estando de pie debajo del hielo apenas unos minutos antes; pero la gente no aprende y una vez pasado el susto rápidamente se sentaban en los trozos caídos para inmortalizar el momento.
Otra rutilla de domingo realizada por nuestra preciosa comarca.
